lunes, 11 de noviembre de 2013

Reseña de Bajo una extraña nevada, por Natalia Gauna, publicada en Revista Tónica

En cada paso un verso

Por @NatiCGauna
Bajo una extraña nevada
Bajo una extraña nevada
De Mauro Quesada
Sello editorial El Ojo del Mármol
46 páginas. 2013
$40
Una primera lectura que no lleva más de veinte minutos. Demasiado rápido para comprender qué acabo de leer. Una segunda lectura, detallista, con pausas y anotaciones pero todavía no aparece la clave de Bajo una extraña nevada, primer libro de poemas de Mauro Quesada.
Son treinta poemas breves -ninguno supera los diez versos- cuarenta y cuatro páginas en las que predomina el blanco y que, paradójicamente, conforman un libro. Entonces, una tercera lectura. Esta vez sin saltos de páginas, como si pudiera pegar cada poema, uno debajo del otro. Una lectura de corrido, esa es la clave. Así, la unión de los poemas conforma más bien un cuento, un único relato que traza líneas de un personaje, de un tiempo y un espacio evocado.
Un transeúnte recorre en una noche de invierno las calles de la ciudad que habita mientras evoca otras tantas ciudades conocidas, quizás en sueños, quizás transitadas. Buenos Aires, Manchester, Londres, Nueva York, Paris y Las Vegas son algunas de las mencionadas en los diferentes poemas. Ellas guardan anécdotas: amores olvidados, desdichas, viajes y el recuerdo de mujeres.
Algunas madrugadas de invierno
las bocas de tormenta
despiden un vapor inaudito
y ya no me siento en Buenos Aires
sino en un sórdido bar de New York
de melancólicas melodías de jazz
donde tomo un whisky tras otro
y al salir me acomodo el sombrero
el sobretodo y me marcho fumando
rumbo a mi solitario departamento
La falta de un título para cada poema refuerza la idea de una totalidad. Un relato que, aunque construido por fragmentos, es único. Un poema y no varios. Cada salto de página, cada hoja en blanco funciona como silencios, pausas en la lectura que otorgan un ritmo y una melodía propia. Estos últimos, elementos ineludibles de la escritura poética. En esta construcción ambivalente entre cuento y poesía, Bajo una extraña nevada no pertenece a ninguno de los dos géneros, dialoga con ellos lo cual lo convierte en un libro interesante por su experimentación discursiva.
Se forma un valle en mí
todo el odio y el amor
caben en una piedrita
donde silbo melodías
hace tiempo olvidadas
Quesada construye un universo minúsculo en cada escueto poema mediante un tono coloquial y un lenguaje de formas simples. Bajo una extraña nevada es un pequeño libro que complace después de varias lecturas. Si un vino cuanto más añejo más sabroso, este libro cuantas más lecturas más se disfruta.